sábado, 5 de enero de 2013

POBRECINES ESTOS DEL PP...



"La lista de espera obliga a reactivar las operaciones en clínicas privadas"


Ayer nos desayunábamos con esta noticia, acompañada con una fotografía del Consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, mostrando una faz entre la angustia, la congoja y/o la lucha contra un estreñimiento feroz.

Y no me extraña el semblante del consejero ante tan aciago destino, otra vez el héroe homérico a merced de los caprichos del hado en mitad del la mar oceana...bastante que pese a todo su disgusto han encontrado la fórmula para al menos dar una salida al paciente, fuente ésta de todos sus desvelos. Y es que la administración autonómica no es capaz de reducir las cada vez más abultadas listas de espera sin tener que recurrir al sector privado.

Hombre, por ser justos, quizá alguna acción humana haya ayudado para llegar a esa situación. 

Quizá y solo quizá, el que el gobierno del PP de Castilla y León haya regalado cuantiosísimas sumas de dinero público a empresas y aseguradoras privadas, haya hecho que éstas dispongan hoy en día de una amplia oferta de servicios de calidad. Los millones de euros invertidos en la ampliación y mejora del Hospital de San Juan de Dios en la ciudad de León, es un buen ejemplo de esta política.

Quizá y solo quizá, el que el gobierno del PP de Castilla y León haya ido reduciendo alternativamente fondos y medios para la sanidad pública, puede haber influido en que ésta sea incapaz de mantener los estándares de calidad y servicio alcanzados en el pasado. El que cada vez haya menos médicos y personal sanitario en general, el que consecuentemente su trabajo se halle sobredimensionado, todo esto en virtud de una decisión política que ha primado otras "necesidades"...todo ello ha podido influir en que a día de hoy la sanidad pública en Castilla y León (y en otras autonomías gobernadas desde hace tiempo por el PP) esté al borde del colapso.

Es más evidente que el PP hace mucho tiempo que decidió que la sanidad es un negocio y que ha tomado decisiones en la persecución de este objetivo. Primero de forma más disimulada, cuando su poder no era omnímodo. Ahora con todo el descaro que da el control absoluto y la certidumbre de que al no haber contrapesos, el cambio total de modelo está al alcance de su mano. 

Lo vemos en Madrid, Castilla y León... la sanidad de calidad para quién se la pueda pagar y para el resto un sistema de beneficencia (que no se diga que los buenos cristianos no tienen compasión por los necesitados).

Pero eso sí, veremos como cada paso que dan va a estar obligado por los acontecimientos, ellos no querían...

Toca prepararse porque no habrá cartilla, tarjeta o carné que valga; el único que con seguridad abrirá todas las puertas es el que el presidente de la Junta de Castilla y León sostiene con firmeza en la fotografía.

Y es que ya se sabe, no es que nos guste, es que no se puede hacer otra cosa.



1 comentario:

  1. Terminaremos "comprando" uno para tener derecho algo! Al tiempo. Que indignos y miserables.

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